Tras el primer viaje de Brindisi a Marghera con cenizas de térmica, salimos hacia Split, Croacia para cargar cemento a granel con destino a Licata, Sicilia donde hemos llegado esta mañana.
Una imagen, de algún santo, supongo, nos da la bienvenida a Licata.
El castillo, en lo alto, y debajo el cementerio con unos panteones que parecen casas de grandes que son.
Así quedó el cemento que cargamos en Split.
Barcos de pesca atracados en Licata.
A continuación los desayunos de nuestro cocinero, que se le da bien la pastelería.
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